Un importante desafío asumió en enero de este año nuestro Padre Director de las presencias salesianas de Calama y Antofagasta, Miguel Rojas Andrade, quien con una amplia trayectoria en el ámbito religioso, viene con la tarea de acompañar a toda nuestra comunidad pastoral junto con animar y estar presente en nuestro colegio, pero por sobre todo no perder el centro de lo que se está haciendo, que es educar-evangelizando y evangelizar-educando.

Este pasado mes de marzo nuestro Padre Director celebró 43 años de vida religiosa tras ser ordenado sacerdote el 30 de septiembre de 1989 por el Cardenal Raúl Silva Henríquez en el Templo María Auxiliadora de Lo Cañas. La vida sacerdotal de nuestro Padre Miguel se ha desarrollado en diferentes casas salesianas, desde 1990 a la fecha, pasando por Concepción, La Serena, Valparaíso, Talca, Iquique y Santiago.

Respecto a su trayectoria, el Padre Miguel nos indicó que “nací, fui criado y me eduqué en Santiago. Pero una vez que fui ordenado sacerdote, fui a provincia, donde siempre estuve. Solo del 2015 al 2017 estuve en la capital, ya que todo lo demás y los años en sacerdocio lo hice en provincia y he recibido una riqueza inmensa, porque cada lugar tiene lo propio y siempre me he nutrido de eso. Uno piensa que le va a enseñar a la gente y muchas veces los mismos niños te enseñan muchas cosas. Hay una riqueza grande que podemos extraer y sobre todo que los salesianos venimos a entregar lo mejor que tenemos, que es acercar a los jóvenes y a las personas a Dios”.

Sobre qué impresión ha tenido en sus primeras visitas a Don Bosco Calama, recalcó que “tengo la mejor, porque creo que estamos muy bien ubicados los salesianos en esta zona. Hay que ir a las periferias, justamente como nos invita el Papa Francisco y no quedarse ‘balconeando’ en esa expresión que usa y que significa que es quedarse apoltronado mirando como pasan las cosas. Eso no, porque nosotros queremos una iglesia de salida que ha llegado a Calama a educar a los jóvenes”.

En este contexto, nuestro Padre Director Miguel Rojas manifestó para toda nuestra comunidad educativa pastoral salesiana que “el mensaje para este año es el que nos dio el Rector Mayor, Padre Ángel Fernández Artime, y que nos envió desde Roma, ese lema que es tan interesante y que es el sueño de los nueve años, donde un niño de esa edad no entiende mucho lo que estaba pasando y que es de cuarto básico hoy en día. Pero, ese sueño es el que Don Bosco lo hace realidad después en el trabajo que realiza, porque descubrió, y seguramente muchas personas lo fueron ayudando, pero él supo cuál era la misión a la que estaba llamado. El tratar de ayudar a estos jóvenes que necesitan de una buena educación, de una buena formación y sacarlos del lugar donde están, y piensan que no tienen tanto potencial y promoverlos”.

Por último, nuestro Padre Director recalcó que “por eso habla de esa expresión de ‘lobos transformarlos en mansos corderos’, ya que es muy linda la frase que hay ahí, porque justamente cuando estos chicos concluyen con la titulación, para uno es un triunfo. El mensaje es seguir trabajando en unidad, en fraternidad y por sobre todo que estamos todavía viviendo la octava de pascua de resurrección y el Señor nos tiene que animar en el trabajo que vamos realizando, ya que es el centro de nuestra vida, de todo lo que estamos haciendo y de lo que somos. Les deseo a la comunidad educativa de Calama lo mejor y que vamos a trabajar siempre muy unidos, porque la unión hace la fuerza”.